Una epidural es un género de anestesia donde se inyectan anestésicos en el espacio epidural de la medula espinal, creando un bloqueo anestésico que deja un parto sin mal.
Ofrecer a luz no posee por qué razón ser lamentable. Un parto sin mal es viable y si bien no hay garantías (existen muchos componentes que entran en juego), emprender el parto sin temor, informado y consciente puede diferenciarse. El testimonio de Berta da fe de esto. Berta nació dejándose llevar, sin temor, sin mal, conectada a su instinto ahora su bebé. Y de esta forma, tras una dura guerra contra la infertilidad, Tiago y Berta por último recorrieron juntos el sendero para hallarse al otro lado de la piel.
Una distribución entretenida y respetuosa
Pude reposar hasta las 2 am, soñando con el trabajo de parto y cantando en sueños. Se encontraba de vuelta con el conjunto de mujeres. Me vi como en una gruta cercada por una cascada, había mujeres mayores y jóvenes y me pusieron flores en el pelo y cantaron conmigo. Apertura de un portal. Me sentí acompañado.
En el momento en que me desperté alegre, las contracciones eran cada 5 minutos, pero aun de esta manera eran completamente llevaderas, por no decir cómodas.
Virtudes del parto natural sin anestesia epidural
- El parto prosigue su curso natural, sin intervención externa que altere o modifique su curso.
- Es mucho más natural y respetuoso con el cuerpo de la madre y del bebé.
- Ya que no hay vías en su cuerpo, la madre puede desplazarse libremente en la salón de partos, lo que la contribuye a lidiar con el mal y aguantarlo mejor.
- Deja a la mujer ser mucho más proactiva en todas y cada una de las etapas del trabajo de parto.
- Un parto sin anestesia epidural y con la menor proporción de intervenciones probables le da a la mujer un mayor control sobre el lapso del parto, lo que asimismo le da mucho más seguridad y seguridad en sí.
- La mujer se está recuperando mucho más veloz tras el parto y está en mejores condiciones físicas y sentimentales para concebir al recién nacido.
Hay que tener en consideración que un parto natural es viable siempre y cuando sea de bajo peligro y no haya adversidades que supongan un riesgo para la mujer o el bebé. Es esencial rememorar que un parto natural sin epidural, como todos parto, debe efectuarse siempre y en todo momento con un equipo de expertos sanitarios y con la seguridad máxima tanto para la madre para el niño.
– Ejerce y ejerce las respiraciones.
Esto no es una tontería, las respiraciones asisten a encauzar el temor, el agobio, el mal. Te recomiendo leer estas 2 entradas:
Respiración abdominal
Epidural sí o no: de qué forma soportar el mal
Muchas mujeres opínan en el momento en que opínan en su plan de parto o de qué forma va a ser ese instante con sus temores y inquietudes, suponen que lo destacado va a ser un parto natural sin epidural. Otros suponen que está en sus manos no sentir mal, ¿por qué razón hacen eso? Las dos críticas son válidas y nos afirmarás cuál es tu situación: epidural sí o no.
Pero es verdad que muchas de las mujeres que tenían premeditado no ponerse la epidural en el momento en que comienzan a sentir los primeros dolores permanentes y fuertes, lo solicitan a voces.
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