Saltar al contenido

¿Cuál es la isla más volcánica?

Volcán de la dorsal oceánica

Hay 2 ejemplos: Islandia, la isla volcánica mucho más grande de todo el mundo, y la isla Jan Mayen, las dos situadas en el Océano Atlántico.

Un día uninstagramerome preguntó: ¿Cuál es tu destino preferido?

No pude eludir responderle: Cualquier isla volcánica perdida en la mitad del océano. Como es. La insularidad se encuentra dentro de las especificaciones geográficas que siempre y en todo momento me ha atraído mucho más, y igualmente los volcanes siempre y en todo momento me han fascinado por su carácter radical, dramático y visceral. Aún de este modo, matamos 2 pájaros de un tiro para proseguir con el nuevo top 5.

Volcanes activos en Canarias

El Teide es el tercer volcán mucho más prominente de todo el mundo canario

Los volcanes de Tenerife, La Palma, Lanzarote y El Hierro aún están considerado activo.

Parque Natural de Timanfaya

Antes de ingresar en el parque, te invito a conocer el Centro de Interpretación de la Mácula Blanca. Esta visita anterior te dejará entender todo cuanto hallarás a causa de la erupción del volcán de 1730. Además de esto si disfrutas el senderismo y te planteas realizar una ruta de senderismo para saber el parque, te invito a que hagas la ruta del colectivo turístico. De este modo te van a explicar todos y cada uno de los puntos. Para el senderismo, el Parque Natural de los Volcanes al lado de Timanfaya es quizás mucho más conveniente.

Merced a las erupciones volcánicas en la isla, se formó esta gruta. Puedes reservar una visita dirigida de 45 minutos y no te arrepentirás de los diez euros que pagas por el ingreso. Si eres una de aquellas personas a las que les preocupa un tanto entrar a websites cerrados, no dejes que el nombre de este rincón te desanime. Solo hay una región un tanto mucho más profunda, pero se puede pasar sin inconvenientes. Seguimos por exactamente el mismo tubo volcánico que visitamos antes, pero en esta ocasión en el lago desarrollado por la infiltración del agua. Jameos del Agua.

Introducción

Las islas volcánicas, asimismo llamadas islas oceánicas, son construcciones geológicamente poco comunes que están en cuencas oceánicas y se forman por erupciones de volcanes submarinos formados en el fondo del océano (Condie, 2016). La erupción volcánica submarina amontona capas de lava que en ocasiones tienen la posibilidad de romper la área del agua. Cuando la lava llega a la área, se coagula y forma una isla volcánica (ver Figura 1).

La isla volcánica mucho más conocida que se formó en las últimas décadas es la isla de Surtsey (del nombre de un enorme de fuego en la mitología norteña), que brotó en frente de la costa sur de Islandia en 1963 (Schipper et al., 2015). Se produjo desde una erupción freatomagmática (asimismo llamada Surtseyan), un género de erupción donde el magma y el agua entran en contacto, ocasionando violentas detonaciones (Houghton et al., 2015). Otros ejemplos recientes de islas volcánicas que han subsistido a la erosión por agua y viento tienen dentro: i) Nishinoshima y Nijima, formadas en 1974 y 2015 respectivamente (las dos cerca de El país nipón); y ii) Zubari, una isla yemení que brotó en 2013.

«Hay que estudiar a convivir con ellos»

La Palma tiene un largo historial de erupciones, pero sus fieros asaltos no acostumbran a considerarse peligrosos. La química de su lava la hace fluir como ríos perezosos en vez de explotar en las tráficas detonaciones que asolan otras unas partes del planeta. La última erupción en la isla fue en 1971, en el momento en que la roca derretida afloró de una fisura en una zona escasamente poblada cerca de la costa sur, lanzando fuegos artificiales geológicos que provocaron daños parcialmente pequeños.

Desde ese momento, no obstante, la población de la isla creció; El día de hoy viven mucho más de 86.000 personas en 440 km cuadrados. En el momento en que el volcán entró en erupción el año pasado, la lava envolvió mucho más de 2800 inmuebles, 864 acres de tierras de cultivo y mucho más de 70 km de caminos. Quedan por enfrente varios años bien difíciles de restauración, obstaculizados por el calor magmático persistente y un futuro económico dudoso.

Descubre más contenido interesante: