Apodado «El señor de los cielos» por su flota de 12 aeroplanos Boeing 727. Lavó mucho más de $200 millones del letrero de Medellín para financiar su compañía: el letrero de Juárez.
—En el momento en que muera, solo deseo que me sepulten aquí y plantar una ceiba allí. Ah, y jamás deseo que vengan a visitarme por el hecho de que el cuerpo es una herramienta que nos dan para estar en la tierra.
Esta fue la tercera y última vez que mi padre le ha dicho a mi madre ahora mí qué llevar a cabo con sus restos en el momento en que muriera, a sabiendas de que esto sucedería mucho más temprano que tarde.
El organizador
2 estadounidenses estaban entre las víctimas del horrible ataque que condujo a la intensificación de la persecución de Escobar y sus secuaces por la parte del gobierno de George Bush padre. Operaciones policiales estadounidenses consiguieron parar al primordial organizador del ataque al Boeing 727 en 1991: Dandeny Muñoz Mosquera.
Esta sicario, famosa con el alias de La Quica, fue uno de los más importantes asesinos del letrero de Medellín en ese instante. Tras su arresto, fue juzgado y culpado a diez cadenas perpetuas. Nick La Quica hoy en día cumple su condena en la Penitenciaría Federal de Máxima Seguridad ADX Florence en Rojo.
High Tech
Rich Mountain Aviation, filial del Letrero de Medellín de Barry Seal, tenía un jet Lear, helicópteros, excedentes de aeroplanos de transporte militar y múltiples aeroplanos monomotores y bimotores. Asimismo tenía 2 navíos con complejos equipos de navegación y comunicaciones… tal como varios vehículos y camiones, según el sitio Cubadebate, citando el testimonio de Seal. Unas sesenta personas trabajaban en la compañía. Contaban con la última tecnología actualmente: radios de alta continuidad, criptógrafos telefónicos, equipos de comunicaciones por satélite y lentes de observación nocturna para pilotos de aeroplanos.
Los caminos que conducen a Escobar
Múltiples jefes del cártel de Medellín tenían su flota de aeroplanos a nombre de familiares, autorizados por Aerocivil. Hasta el momento, era común que los narcotraficantes usaran testaferros para registrar sus aeroplanos. El 19 de noviembre de 1980, esta compañía le dio al mercader Alonso de Jesús Muñoz Restrepo, acusado de ser colega de Pablo Escobar, permiso para importar un helicóptero Messerch Mitt.