En España estuvo bajo la dirección de Joan Fortuny y en USA bajo la dirección de Mark Schubert, 17 adiestramientos por semana delegados entre piscina y gimnasio, nadando entre 20 y 25 km cada día.
En sus charlas, dadas tanto en castellano como en inglés, David Meca traslada su experiencia en el deporte de prominente desempeño al planeta empresarial, resaltando valores y conceptos como: la motivación y la superación, las crisis como ocasiones, el trabajo en grupo , innovación y Imaginación, administración de adversidades, desafíos, estrategia y planificación y liderazgo.
David contribuye su experiencia como nadador profesional al planeta empresarial.
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El nadador de fondo español David Meca ha podido pasar la prueba merced a las bajas temperaturas que le forzó a anular tras 27,5 km. El comienzo de la prueba se retrasó prácticamente una hora gracias a la climatología. Si bien las condiciones no eran las mejores, David decidió procurarlo el día pensado. De entrada, la travesía se había creado con normalidad, si bien el nadador se quejaba de malas manos y cara a raíz del frío. Al ver que la temperatura del agua en la zona central del lago era de seis grados (ocho en sitios considerablemente más próximos a la costa), David empezó a padecer los efectos de la hipotermia tras cinco horas de nadar y brotaron los primeros síntomas, como confusión, falta de la coordinación y la somnolencia tienen la posibilidad de ser evidentes.
En este momento sé que pasé por instantes de peligro pues me explicaron que entre los síntomas de la hipotermia es la carencia de reflejos y la confusión mental que se padece. Debieron elegirme y sé que lo hicieron lo más bien que se pueda”, añadió Meca. David Meca recorrió precisamente 27 km desde el punto de inicio. David Meca se negó a parar la prueba y en el desconcierto en el que estaba le señalaron un punto donde había de estar la misión por donde se dirigía el nadador, sin comprender en ese instante que no se trataba del supuesto punto de llegada, sino más bien de otro escogido por la organización para obligarlo a escapar del agua. David Meca se negó a dejar la prueba y en la confusión donde estaba le señalaron un punto donde había de estar la línea de misión, hacia donde se dirigía el nadador, sin entender en ese instante que ese no era el único sitio sospechoso de llegada, sino más bien otro optó por sacarlo por fuerza del agua.Una operación que se realizó tras pasar por la región considerablemente más bien difícil, encabezada por el habitual Castillo de Urquhart, que se asienta sobre un promontorio donde convergen unas regiones con fuertes corrientes que desgastan aún mucho más a los bañistas del agua
LA PASTILLA DE DA VID MECA
– ¿Qué palabra usarías para determinar enfermería? Hero-¿Qué no debe faltar en su botiquín? Algodón y peróxido de hidrógeno: ¿deporte, gimnasio o aire libre? Afuera – ¿Qué comida no podría prescindir? Frutas y vegetales. Plátanos de Canarias particularmente.-Si no podría haber sido deportista, ¿qué profesión habría escogido? No sabía de qué manera llevarlo a cabo de otra forma. Ser deportista fue lo destacado que me pasó.
MÁS ILUSIÓN QUE FUERZA
Opuestamente a eso que cabría aguardar, Meca no recurrió a psicólogos antes de lanzarse al agua para enfrentar desafíos que ningún otro humano hallaría probables. “Pues es un deporte muy solitario te haces mucho más fuerte, pienso que en mi caso fue mucho más fuerte la ilusión que el mal. Los 110 km entre Alicante y también Ibiza los hice a nado no por el hecho de que me sintiese fuerte, sino más bien por el hecho de que me hacía ilusión”.
David prosiguió sumando títulos y medallas hasta el momento en que se desmoronó en un campeonato de Brasil en 1999: yo del dopaje, del engaño. En el momento en que me lo afirmaron creí que era una broma y que todo se arreglaría al día después. Como siempre y en todo momento, me levanté a las 5 de la mañana, fui a la piscina, le dije a mi entrenador y me ha dicho: ¿Qué haces aquí? Quédese en el hogar, duerma bien a lo largo de tres años y si uno se marcha antes que se levante la suspensión, volverá. Respondí que sabía que en algún momento deberían ponerse en concordancia conmigo y si entreno 15 km todos y cada uno de los días, por favor déjenme llevar a cabo 20 o 25 km para regresar mucho más fuerte que jamás.
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