Una investigación certifica que estos invertebrados, si bien no tienen cerebro, reducen su actividad a lo largo de la noche. El sueño se encuentra dentro de los estados de accionar mucho más viejos y está intensamente arraigado en la ascendencia animal.
Laura Prieto, estudiosa del CSIC en el Centro de Ciencias Marinas de Andalucía (ICMAN), apunta que es esencial comprender que estos organismos forman una parte del ecosistema marino. Su trabajo, destinado a las ciudades de medusas del Mediterráneo y Atlántico, se enfoca hoy día en desarrollar una herramienta para adivinar la existencia de medusas en un área cierta. El cambio global está afectando a estos organismos, advierte, y su propagación es impulsada por la polución, el transporte marítimo y el incremento de las temperaturas en algunas áreas. No obstante, a mucho más largo período, la acidificación de los océanos y el calentamiento global podrían conducir a una disminución. En esta entrevista a Irene Lapuerta (CSIC Cultura Científica), la científica enseña la situación de estos organismos.
-Las medusas han vivido en la tierra a lo largo de mucho más de 500 millones de años. ¿Qué tienen de particular que han subsistido hasta hoy?
Medusa de huevo frito
Cotylorhiza tuberculata se encuentra dentro de las medusas mucho más extrañas del Mediterráneo. Tiene una gorra amarilla aplanada con un bulto de color cobrizo anaranjado mucho más obscuro en el centro que se semeja a un huevo frito.
Medusas en el Mediterráneo
Medusas del Mediterráneo. Por Dante Alighieri
En el Mediterráneo no hay medusas de esta clase, y en verdad las que hay no tienden a ser fatales. La más habitual en aguas mediterráneas es la Aurelia Aurita, transparente con tonos azulados o rosados. Las gónadas son blancas o amarillas en los machos y rosadas o moradas en las hembras. Asimismo conocidas como medusas paraguas, medusas luna, medusas platillo o medusas de 4 ojos, pican, pero no muy lastimosamente.
Si muerden, ¿debo añadir arena u orina?
Hay muchos remedios naturales como géneros de medusas. Jamás hay que rayar ni frotar con arena. Si no es en una playa observada, lo destacado es asistir al avituallamiento. Se estima que mear sobre la picadura calma la urticaria. “Entre tirar arena o orinar, orinar”, afirma categórico Tomás.
Son una suerte de células de medusa que se pegan a nuestra piel en el momento en que van de la picadura. Se les conoce como cnidocitos o cnidoblastos, cuyo propósito es proteger al animal y atrapar presas para su nutrición. Fuera de las medusas, llevan vida propia, por de esta forma decirlo. En el momento en que estas células mueren, dejan de producir el elemento tóxico. Un ácido como la orina podría neutralizarlos, si bien no es la mejor solución. El ácido acético puede ser conveniente al vinagre en este sentido.
Este hallazgo es esencial pues fue el primer hallazgo de que una criatura sin cerebro debe reposar.
Llevamos un buen tiempo pensando en el sueño de los animales. En criaturas como los humanos o los gatos, la carencia de sueño es de manera fácil aparente, pero en animales mucho más primitivos como las medusas, entender sobre el sueño y la carencia de sueño en esos cuerpos es un secreto.
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