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¿Qué significa la palabra Gijón?

nombre propio

Localidad de Asturias, norte de España. Su primordial economía es de base industrial, siendo el campo del metal la primordial base industrial de Asturias. De tradición marinera, con industria de servicios y turismo.

¿Por qué razón aún no se sabe el nombre de la región mucho más grande y Conceyu de Asturias?

El nombre de la región y el conceyu de Xixón fué mudando en la documentación histórica durante los siglos. Geygion, Gigon, Giion, Gyjon, Xijon, Jixon y Xixón son ciertas formas que se tienen la posibilidad de marcar sobre papel. Tienen la posibilidad de parecer distintas, pero tanto el asturiano como el español lo habrían pronunciado prácticamente de forma idéntica hasta el siglo XVI, en el momento en que el español empezó a vocalizarlo como la «j» de hoy. De esta forma, el español español de alguna forma preservó la grafía vieja con una pronunciación novedosa, al paso que el español asturiano preservó la pronunciación histórica con una grafía un tanto mucho más actualizada (ahora documentada desde 1634).

El anagrama de Gijón

Anagrama de Gijón o Los Garabatones

Ahora se ubica el marco con las letras rojas que forman el nombre de la región con un corazón dentro —Gijón— al puerto deportivo, en un radical de los Jardines de la Reina, prácticamente a la entrada del Recorrido de Poniente, y es indudablemente entre las estatuas mucho más reconocidas de los pobladores de la región asturiana y de los visitantes que la visitan. De nuevo los gijones se retiran y lo han bautizado como «los garabatones» o «las letronas»; Efectuado en acero, fue un obsequio a la localidad en 2011 por la parte de la Asociación de Trabajadores Metalúrgicos de Asturias. Su creador, Juan Jareño, ha amado enseñar que, como esas letras rojas, Gijón es una localidad activa y también renovadora, sociable y llena de espíritu positivo.

La fuga impecable

En el momento en que entré por vez primera en Gijón, me sentí como en el hogar. Llámalo intuición o enamoramiento a primer aspecto, pero de este modo fue. Desde ese instante fue mi hogar en el norte y hasta hoy absolutamente nadie ha depuesto a mi princesa asturiana.

¿Por qué razón me prestó tanto Xixón? Por el hecho de que me chifla caminar a la llamada del Cantábrico en el Cerro de Santa Catalina, ver a Cimavilla proseguir protegiendo su pasado marinero, y detenerme en Cuesta’l Cholo, sidra en mano; Piérdete por las calles del centro, entre inmuebles modernistas, galerías de arte y fabulosas librerías; Déjate mimar en Santagadea Sport Talaso, sorpréndeme toda vez que paso por Laboral Localidad de la Cultura, regresa a mis sitios de comidas preferidos y revela nuevos sabores, baila en Savoy, toma un coctel en Varsovia…

) Elogio del horizonte

La polémica estatua de Eduardo Chillida, estrenada en 1990, pasó de ser una broma a entre los iconos mucho más estimados de la región. Uno de sus apodos es Baño de King Kong, lo que brinca a la visión al ver su forma y dimensiones.

Como todas y cada una de las proyectos de Chillida, el Elogio del Horizonte de Gijón es algo mucho más que una bonita estatua. Juega con el ambiente. Para conocer el misterio, acércate a él de manera lenta, pasito a pasito, en la estatua y pasea hacia el mar. Y va a ver por qué razón es tan habitual en la localidad.

La madre del emigrante

La estatua de Ramón Muriendas, viendo al mar con el brazo en prominente, es el monumento a la madre del emigrante. Llamada cariñosamente “la lloca de Rinconín”, está ubicada en el Recorrido del Cervigón, con vistas al mar Cantábrico. Es la primera obra escultórica en lenguaje moderno que se instala en un espacio público de Gijón. Su transgresión provocó un vivo enfrentamiento entre los gijonesos de la temporada, pero el día de hoy pertence a las estatuas mucho más simbólicas de la región.

Con una altura de diez metros y mucho más de 500 toneladas de hormigón armado, la estatua desarrollada por el escultor Eduardo Chillida se asoma al mar desde lo prominente de la torre vigía de Gijón. Desde su inauguración el 9 de julio de 1990, se convirtió en un genuino símbolo de la región. El artista vasco plasma en él un inmenso abrazo del mar y el cielo, desde el que se escucha el mar Cantábrico.

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