Edward Jenner (1749-1823), el “Padre de las Vacunas”, fue un enorme estudioso médico que descubrió la vacuna para la viruela. Este hallazgo dejó supervisar y eliminar la viruela, una patología que se había transformado en una grave epidemia en múltiples continentes.
En la mañana del 14 de abril de 1883, el médico carioca Domingos José Freire (1843-1899), instructor de la Capacitad de Medicina de Río de Janeiro, dio un paso extremista hacia su propósito de hacer un vacuna para la fiebre amarilla, una patología que se había transformado en un factor persistente en la sede de la Corte Imperial desde el primer brote en 1849. Inspirado por el químico francés Louis Pasteur (1822-1895), que antes había creado vacunas contra el cólera de las gallinas y el ántrax de las ovejas, Freire y tres alumnos de medicina entraron en una morgue de Niterói y abrieron el cadáver de un marinero que había fallecido de fiebre amarilla hacía menos de una hora antes, tomó sangre de su corazón y muestras de órganos y tejidos y llevó todo al laboratorio de química inorgánica de la capacitad.
Bajo la luz del microscopio, descubrieron en las muestras de sangre del marino al presunto agente causante de la fiebre amarilla, una bacteria que Freire ahora había reconocido y mencionada como Cryptococcus xanthogenius. Ahora, inocularon sangre del cadáver en un conejo, que padeció conmociones y murió en 15 minutos. Extrajeron sangre del animal, donde identificaron los criptococos, y la inocularon a un cuy, que asimismo murió, lo que señala la oportunidad de transmisión del patógeno que causa la fiebre amarilla. Más tarde, en 1928, se descubrió que la patología era ocasionada por un virus.
Inmunidad a la vacuna
En expresiones de Murashko, “Todos y cada uno de los voluntarios que han recibido la vacuna desarrollaron anticuerpos y ninguno presentó adversidades graves”. Además de esto, señaló que prosiguen los estudios con cientos de personas con la vacuna llamada Gam-COVID-Vac.
A inicios del mes vigente, el 3 de agosto, el Departamento de Defensa notificó que el conjunto de voluntarios militares que han recibido la vacuna habían creado inmunidad contra el COVID-19. Por su lado, el Ministerio de Salud ha señalado que esta vacuna garantiza la inmunidad hasta por un par de años.