Almacena el popper en un espacio ventilado.
Seguramente ahora te has dado cuenta de que el popper es un producto de fuerte fragancia. Conque guárdelo en un espacio ventilado a fin de que no huela por todo el piso. Los sitios ventilados asimismo tienen el beneficio de estar secos.
Fué la sustancia dominante entre los hombres gays a lo largo de años, una substancia que jamás pasa de tendencia. “Causa un efecto rapidísimo, prácticamente instantáneo, que dura unos segundos y te sube hasta los 200”, afirma un integrante de este conjunto, que lo define como “una genuina bomba de relaciones íntimas”.
Hablamos del popper, nombre común del nitrato de amilo o butilo, un químico líquido que en el momento en que se inhala incrementa la excitación sexual y relaja los esfínteres. Esta es la razón primordial por la que se ha usado en la escena gay desde la década de 1970, en el momento en que alcanzó su punto máximo en los clubes nocturnos de Novedosa York y después se extendió a las raves y fiestas salvajes de todo el planeta en las décadas de 1980 y 1990.
Los efectos físicos del popper
Sus efectos físicos son: disminución de los escenarios de oxígeno en la sangre, dilatación de los vasos sanguíneos, descenso de la presión arterial y incremento del ritmo cardiaco. Este cambio en el sistema circulatorio perjudica de manera directa al corazón, ocasionando taquicardia y mareos. Asimismo lleva a una disminución de las defensas del organismo. La relajación del músculo liso (por servirnos de un ejemplo, el esfínter) fomenta la erección y cambia el charla, lo que provoca que el charla sea inconsistente y afecte el tiempo de reacción.
A nivel de efectos sicológicos genera una intensa sensación de euforia y incremento del deseo sexual. Asimismo hay agradables distorsiones de la percepción. Unos minutos después hay un bajonazo, que se identifica por agotamiento y un estado depresivo esencial.
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