Yo soy el estado (traducción de la expresión francesa L’État, c’est moi) es un tema político atribuido a Luis XIV de Francia, el Rey Sol, y también interpretado en concepto de detectar al rey con el estado, en el contexto de la monarquía absoluta.
Al rey Luis XIV se le asigna la célebre oración “Yo soy el Estado”, pronunciada frente a unos reticentes tribunales franceses con edictos presentados por nuestro monarca. Hay disconformidades en lo que se refiere a la autoría y contexto de la expresión, pero lo que refleja precisamente en cualquier caso es la concepción absolutista de una monarquía donde el resto de los poderes están sujetos a la intención del soberano. La última gilipollez de los besos de manos reales de Sánchez no sería mucho más que una fácil anécdota con un tipo egoísta que tuvimos que aguantar gracias a estos fracasos políticos si no hubiese exhibido evidentes tendencias déspotas y megalómanas.
Tengamos en cuenta que Sánchez es quien, en entre las escasas entrevistas que ha concedido como presidente, se presentó frente a una Ana Pastor arrodillada para recordarle hasta nueve ocasiones al entrevistador que quien es el presidente del Gobierno, es exactamente el mismo que utiliza fotografías aéreas del estado para darse cuenta en acontecimientos privados, que anda por la 5ta Avenida de Novedosa York como «Reservoir Dogs» o que se fotografía con lentes oscuros en el Falcon imitando a Kennedy.
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